Manual completo sobre cómo recuperar una orquídea (con trucos prácticos)
Las orquídeas son plantas preciosas, pero… tienen mala fama (¡lo sentimos, hay que decir la verdad!), y se las cataloga como plantas difíciles de cuidar. Nada más lejano a la realidad. En verdad, son muy sencillas de cuidar una vez que las conoces.
Como muchas veces no contamos con toda la información, es posible que tu orquídea enferme o presente daños en un momento dado. Pero, tranquli@ a pesar de que parezca que tu planta se secó y ya no hay más que hacer, puedes revivirla, te enseñaremos cómo recuperar tu orquídea y traerla del más allá. En este manual te mencionaremos las causas más comunes y te explicamos cómo cuidar una orquídea que se está muriendo, cómo salvar sus raíces y hojas ¡Vamos a ello!
Cómo cuidar una orquídea que se está muriendo: posibles causas
Si tu planta está marchita, seca o sus hojas no lucen como antes, debes comprender qué le está pasando, este es el primer paso para recuperar tu orquídea. Estas son las causas más comunes:
- Exceso de agua: en caso de que sus hojas estén amarillas, tengan manchas y sus raíces se vean marrones, tu orquídea posiblemente está pasando una crisis por exceso de riego. Entonces, ¿cómo recuperar tu orquídea? Debes retirar la planta de su maceta y controlar el estado de sus raíces, cortar las que estén oscuras o podridas. Después, trasplanta la orquídea a un nuevo sustrato, esto evitará la aparición de alguna plaga oportunista. En esta etapa final es importante que no riegues la planta hasta que sus raíces se vean blancas 😉
- Falta de agua: es normal que nos olvidemos de regar nuestras plantas. Eres culpable, sí. ¿Serás sentenciado? No. Para este caso, también hay una solución, ya que las orquídeas toleran la falta de riego. Eso sí, necesita hidratación urgente. Para recuperar tu orquídea, retira las hojas secas y sumerge la planta con su maceta en agua, espera a que el sustrato se empape y retírala. Un indicador de que todo marcha bien es que sus raíces vuelven a estar de color verde. Y, por supuesto, sus hojas empezarán a verse mejor.
- Quemaduras por sol: si aparecen manchas marrones en tu orquídea, bordes quebradizos y tu planta tiene una apariencia seca, incluso cuando la has regado. Lamentamos informarte que tu orquídea ha tomado mucho sol directo, más del que puede tolerar. La solución para recuperar tu orquídea es simple, cambia la planta de sitio y ponla en un lugar con luz indirecta o donde el sol no la queme en horas de extremo calor. Retira las hojas quemadas si están completamente marchitas y revisa su progreso.
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Cómo recuperar las raíces de una orquídea
Si las raíces están dañadas, pero aún quedan algunas sanas, hay esperanza, puedes recuperar tu orquídea. Sigue estos pasos:
- Paso 1: saca a la orquídea de la maceta y limpia sus raíces con delicadeza.
- Paso 2: si hay raíces en mal estado, ya sean podridas o secas, córtalas con una tijera esterilizada.
- Paso 3: para recuperar una orquídea debes sumergirla en agua con enraizante, esto estimulará el crecimiento de nuevas raíces y fortalecerá las existentes.
- Paso 4: tras una hora, retira la orquídea del agua y colócala en una bolsa con musgo esfagno. Esto creará un microclima ideal. Para potenciar el enraizamiento, pulveriza el agua que utilizaste sobre el musgo.
- Paso 5: ¡Ten paciencia! Con esta técnica las raíces empezarán a salir. Una vez hayan crecido lo suficiente puedes pasarla a una maceta con sustrato especial para orquídeas.
Con este paso a paso conoces en detalle cómo recuperar las raíces de una orquídea.
Cómo recuperar orquídea sin raíces
Para recuperar una orquídea sin raíces necesitarás pocos materiales para salvarla. Para ello requerirás: agua, un recipiente, iluminación y temperaturas templadas.
- Paso 1: con mucho cuidado, saca la orquídea de la maceta y limpia los restos de sustrato viejo. Después, sumérgela en agua para rehidratarla. No debe permanecer sumergida continuamente. Tip extra: alterna su hidratación, un día sumerge las raíces y, al siguiente, usa un pulverizador para rociar sus hojas con agua o revitalizante foliar (como los de Compo o Masso). Cuando empiece a generar nuevas raíces, trasplántala en musgo spagnum y mantén la humedad.
- Paso 2: pasados unos días, las raíces empezarán a crecer, lo que indica que todo va bien. Con las primeras raíces las hojas empezarán a fortalecerse.
- Paso 3: cuando las raíces sean notorias, ponla en una maceta. Luego de unos días aplica fertilizante y monitorea el progreso.
Es fundamental que en todo este proceso para recuperar tu orquídea, vigiles el estado de la planta, ya que estará muy debilitada al no tener raíces.
Cómo recuperar las hojas de las orquídeas
Si estás buscando cómo recuperar las hojas de tu orquídea, te enseñaremos lo que debes hacer para que eche nuevas y revivan las que aún pueden salvarse. Sigue este paso a paso:
- Paso 1: poda las hojas y tallos que estén en mal estado. Solo deja los nuevos.
- Paso 2: revisa su drenaje y, en caso de que lo necesite, riégala.
- Paso 3: verifica que esté recibiendo una buena iluminación. Si no es así, ubica tu orquídea en otro sitio.
- Paso 4: aplica vigorizante foliar apto en las hojas y fertilizante en el sustrato para recuperar tu orquídea.
- Paso 5: asegúrate de que tenga un buen nivel de humedad ambiental y pulveriza sus hojas.
- Paso 6: espera a que tu planta empiece a dar nuevas hojas 🙂
Plagas de la orquídea
En ciertas situaciones, recuperar una orquídea tiene que ver con encontrar polizones 🕵️. A veces la pérdida de hojas, el debilitamiento general o las raíces enfermas son síntomas que pueden estar relacionados con una plaga. Para descartar esta causa, examina hoja por hoja y busca si hay algún insecto, deformación o mancha. Si es una plaga lo que está atacando a tu orquídea, es fundamental que apliques un producto específicamente formulado para combatir esa plaga. Estas son las plagas que puedes encontrar:
- Cochinillas: son la plaga más común y destructiva, adoran desvivir orquídeas. Para encontrarlas, revisa el envés de las hojas y las raíces. Tienen un cuerpo pequeño de color blanco. Estos insectos se alimentan de la savia y para eliminarlos puedes aplicar anti-cochinillas, ¡te desharás de esta plaga y podrás recuperar a tu orquídea!
- Pulgón: son una clásica pesadilla, diminutos pero nocivos. Se alimentan de la savia, debilitando a tu planta. Incluso, pueden transmitir virus, atraer a otros insectos y hongos. Son de color negro o verde, tienden a aparecer en hojas blandas o en flores. Para recuperar tu orquídea es necesario que apliques algún insecticida contra pulgones, eliminarlos manualmente no suele ser la mejor idea.
- Araña roja: son tan pequeñas que es muy difícil localizarlas, pero no imposible. Dejan a su paso una especie de tela de araña y provocan que las hojas se vuelvan grises. Para acabar con ellas puedes utilizar acaricida, ya que, si bien se llama araña roja, no es un arácnido, sino un ácaro, solo poseen este nombre por el rastro que deja.
- Hormigas: las hormigas son aliadas del pulgón, por tanto, son nuestras enemigas. Funcionan como un vehículo para ciertos virus. Deshazte de ellas con venenos que no dañen a tus orquídeas, que sean aptos para jardín. Si has descubierto hormigas, eliminarlas hará que recuperar a tus orquídeas sea más sencillo.
- Caracoles: si tus orquídeas están fuera de casa, puede que estos insectos lentos, pero hambrientos estén alimentándose de ella. Los caracoles adoran comer flores, hojas e incluso raíces. Para encontrarlos puedes examinar tu planta, son muy fáciles de localizar. Con un antilimacos podrás recuperar a tu orquídea y su belleza.
- Trips: es una plaga bastante común que se alimenta de brotes nuevos succionando la savia de las hojas, flores y tallos. Algunos síntomas que puedes ver son manchas plateadas en hojas y pequeños bultos. Puedes eliminarlos y recuperar tu orquídea con insecticidas o aplicando alcohol al 70% con algodón sobre tus plantas.
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